MASTITIS EN RUMIANTES 

 

Comúnmente se trabaja con una frecuencia de 50-60 pulsaciones por minuto y una relación de pulsaciones de 60-70% (o sea, una relación existente entre los tiempos de succión y masaje de 60:40, 65:35 o 70:30). El nivel de vacío con el que trabaja depende de la altura de la línea de leche: en línea alta (más de 1,70 m) es de 48-50 kPa; en línea media (1,20-1,40 m) es de 46-48 kPa; y en línea baja (por debajo del piso) es de 42-44 kPa.

 

El aumento de los niveles de vacío incrementa los recuentos celulares de la leche. A pesar de que, a mayor vacío menor tiempo de ordeño, niveles más reducidos de vacío de 42 kPa, provoca lesiones en la punta del pezón e incrementa los recuentos celulares de la leche. Por otro lado, un aumento en la frecuencia de pulsación también puede hacer que el ordeño sea más rápido; sin embargo, altera el tiempo de succión y masaje, pudiendo provocar isquemias e inflamaciones en todo el canal del pezón, lo cual trae aparejado la aparición de mastitis.

 

Lo más aconsejable es trabajar con un nivel de vacío de 45-50 kPa (según la altura de la línea de leche), una frecuencia de 60 pulsaciones por minutos y una relación de pulsaciones del 60%.